Desde la Plaza de las Tres Culturas, la excandidata al gobierno del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, llamó a los jóvenes a “defender la libertad y lograr la hazaña de transformar al país”.
Tras pasar la noche en las inmediaciones de la zona arqueológica, y colocar una ofrenda por los caídos en la matanza del 2 de octubre de 1968, la texcocana tomó como ejemplo la lucha de los estudiantes en los sesenta para reiterar que: “Vamos a seguir luchando por nuestro derecho a la igualdad y a la tranquilidad”.
En el cuarto día de la “Marcha por la Esperanza” y antes de reanudar su caminata hacia la Secretaría de Gobernación, les habló a los jóvenes, a quienes consideró como “el motor del cambio verdadero” porque desde que nacieron “han crecido en un México con una profunda desigualdad social”.
Añadió: “Han tenido que enfrentar una dura realidad: gobernantes y gobiernos corruptos han saqueado al país, se han acabado la gallina de los huevos de oro y los han ignorado”. Por eso, su andar es notable porque en ellos, agregó, “crece la semilla de la esperanza”.
Es por eso por lo que los invitó a defender su libertad y “lograr la hazaña de transformar al país”. A cambio, les ofreció “no fallarles y luchar por el rescate del Estado de México” porque en las elecciones del 4 de junio, dijo, “Morena ganó” la gubernatura, pero los gobernantes y gobiernos corruptos quieren impedir su triunfo.
“Que quede claro, somos un movimiento pacífico, pero no vamos a tolerar más injusticias. Lucharemos por la defensa del voto”, advirtió.
Resaltó que se siente honrada por encabezar un movimiento de millones de mexiquenses que están hartos de tantas mentiras, de tanta desigualdad social, de tanta pobreza. “Pero sobre todo están cansados de tanta corrupción e impunidad en el Estado de México y en todo el país”.
Al rendir homenaje a los estudiantes caídos en la matanza de 1968, Gómez Álvarez recordó que fue producto de la lucha de un movimiento estudiantil que surgió contra el autoritarismo y a favor de la democracia.
“Esto, compañeros, es un homenaje a quienes en el pasado han luchado por justicia. Un homenaje a quienes nos mostraron el camino para exigir lo que por derecho nos corresponde. Bien decía el presidente de Chile, Salvador Allende: ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica”, citó.