Marcelo Ebrard, secretario de Economía de México, destacó que el país es ahora el principal socio comercial de Estados Unidos, liderando tanto en exportaciones como en importaciones. Esto otorga a México una posición de fuerza en la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), programada para 2026.
En un encuentro con medios, Ebrard subrayó la importancia de aprovechar esta ventaja estratégica ante posibles presiones de EE.UU. y Canadá. «Llegar a la mesa en una posición débil sería un error. México tiene un peso significativo en esta negociación, ya que cualquier cambio en el tratado afectaría a miles de empresas, incluidas algunas de las más grandes de Estados Unidos», aseguró.
El funcionario reconoció que, aunque la revisión del T-MEC representa un desafío, México está preparado para enfrentarlo. La Secretaría de Economía se encuentra a la espera de que el presidente electo de EE.UU., Donald Trump, designe a su equipo de negociación para iniciar conversaciones. Ebrard anticipa un enfoque proteccionista por parte del nuevo gobierno, pero no tan extremo como en 2018, cuando Trump amenazó con desmantelar el antiguo Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Hoy, la situación es diferente. Según Ebrard, el T-MEC es uno de los acuerdos comerciales más exitosos del mundo, con un crecimiento del 32% desde su implementación. «El tratado ha beneficiado tanto a México como a Estados Unidos, aumentando el comercio bilateral. Imponer aranceles perjudicaría a ambas economías», destacó el secretario, enfatizando que la estabilidad comercial es clave para mantener el crecimiento conjunto.
Con esta perspectiva, México llega a la mesa de negociación con una clara ventaja y una estrategia firme, buscando consolidar los beneficios de un tratado que ha impulsado la economía de la región.