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Con una visión integral de movilidad urbana, el Gobierno Municipal de Nuevo Laredo, a través del Instituto Municipal de Planeación y Desarrollo Urbano (IMPLADU), presentó la estrategia de transformación del transporte público, que busca hacer más eficiente, moderno y accesible el servicio de transporte colectivo en la ciudad.
El plan contempla la implementación de una Ruta Troncal Express (RTE) y la construcción de cuatro Centros de Transferencia (CT) distribuidos estratégicamente, con el objetivo de reducir los tiempos de traslado, mejorar la conectividad y brindar un servicio de calidad a los usuarios.
“Estamos planteando una transformación total del sistema de transporte urbano, que incluya rutas más cortas, traslados eficientes y una estructura bien planeada que conecte zonas clave de la ciudad”, destacó José Lauro Villarreal Morales, director del IMPLADU.
Los cuatro Centros de Transferencia estarán ubicados cerca de hospitales, oficinas gubernamentales, escuelas y áreas comerciales, facilitando el acceso a servicios esenciales. Desde estos puntos saldrán rutas alimentadoras que cubrirán un radio de hasta 3 kilómetros, eliminando recorridos innecesarios y mejorando la cobertura local.
La Ruta Troncal Express será el eje central del nuevo sistema. Conectará los cuatro CT en ambos sentidos con unidades modernas y confortables, que sólo harán paradas estratégicas entre cada centro. El recorrido total se completará en aproximadamente 60 minutos, optimizando significativamente los desplazamientos de norte a sur y de oriente a poniente.
El proyecto contempla una flota de 12 nuevas unidades, cada una con capacidad para 48 pasajeros, equipadas con tecnología de última generación, accesibilidad universal y sistemas de confort.
Además, cada Centro de Transferencia incluirá paradores techados, bancas, iluminación y enfriamiento por aire húmedo, brindando seguridad y comodidad a los usuarios.
La inversión total estimada es de 45 millones de pesos, destinada a la adquisición de las unidades para la RTE y a la construcción de los cuatro centros. Mientras que las rutas alimentadoras serán concesionadas a operadores particulares, la RTE será operada directamente por el municipio, garantizando eficiencia y sostenibilidad a largo plazo.
Con este plan, Nuevo Laredo da un paso firme hacia la modernización de su infraestructura urbana, apostando por una movilidad inteligente y centrada en las personas.
