La Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed) ha declarado la suspensión indefinida de actividades en todos los juzgados y tribunales federales del país, iniciando este miércoles. La medida busca presionar al Congreso para establecer una mesa de negociación sobre la controvertida reforma judicial promovida por el Presidente.
Juana Fuentes Velázquez, presidenta de la Jufed, advirtió que la reforma no solo amenaza la independencia judicial, sino también la seguridad nacional y los derechos humanos, poniendo en riesgo la democracia. El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) reconoció la situación y anunció que atenderá solo los casos urgentes, sin precisar aún cuáles juzgados estarán disponibles.
El pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación expresó su preocupación por el paro, aunque la ministra Norma Lucía Piña Hernández, presidenta del PJF y del CJF, subrayó que los trabajadores son autónomos y que la situación corresponde al CJF, no a la Corte.