El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el Congreso Nacional Indígena (CNI) condenaron el “cobarde ataque policiaco” contra maestros de la CNTE y comunidad indígena de Nochixtlán, Oaxaca, por lo que llamaron a todos los pueblos y sociedad civil a cerrar filas con el movimiento magisterial.
En un comunicado conjunto, el EZLN y el CNI advierten hoy que frente al “cobarde ataque represivo” que sufrieron los maestros y la comunidad en Nochixtlán, los pueblos, naciones y tribus que integran estos organismos les expresan su apoyo solidario y manifiestan que “magisterio digno” no está solo.
“Sabemos que la razón y la verdad están de su lado, que la dignidad colectiva con la que habla su resistencia es inquebrantable, y esa es la principal arma de los que de abajo somos”.
Además, “repudiamos la escalada represiva con la que pretenden imponer en todo el país la reforma neoliberal capitalista a la que llaman ‘educativa’, principalmente en los estados de Oaxaca, Chiapas, Guerrero y Michoacán. Con amenazas, persecuciones, golpes, encarcelamientos injustos y ahora asesinatos se quiere doblegar la dignidad del magisterio en rebeldía”, apuntaron el CNI y el EZLN.
Luego hicieron un llamado a todos los pueblos y a la sociedad civil en general a estar con el magisterio que resiste en todo momento, a reconocerse en ellos, pues la violencia para despojarlos de garantías laborales básicas, con el propósito de hacer privada la educación, “es un reflejo de la violencia con la que nos están despojando a los pueblos originarios, a los pueblos campesinos y urbanos”.
También señalaron que quienes se regocijan en el poder decidieron que la educación, la salud, los territorios indígenas y campesinos, e incluso la paz y seguridad, son una mercancía para quien pueda pagarla, que los derechos no son tales sino productos y servicios que se arrebatan, se despojan, se destruyen, se negocian según lo dicte el gran capital.
“Y esta aberración –la reforma educativa– pretenden imponerla de una manera sangrienta; asesinando y desapareciendo a nuestr@s compañer@s, enviando a prisiones de alta seguridad a nuestr@s vocer@s, haciendo de la tortura descarada la mercadotecnia gubernamental y, con ayuda de los medios de comunicación de paga, equiparando con la delincuencia a lo más valioso de la sociedad mexicana, es decir, a quienes luchan, no se rinden, no se venden y no claudican”.
También exigieron el cese a la represión en contra del magisterio en lucha y la liberación inmediata e incondicional de todos los “presos políticos”, al tiempo que hicieron un llamado “a todos los pueblos del campo y las ciudades a estar atentos y solidarios con la lucha magisterial, a organizarse de forma autónoma para estar informados y alertas ante esta tormenta que cae sobre todas y todos”.