Calderón gastó 110 mdp en equipo de espionaje vs huachicoleo, pero jamás los usó; solo benefició a empresarios panistas: Proceso
Pese a que el contrato original no contempla pago a los intermediarios de la empresa israelí, Héctor de la Garza Poinsot, dueño de Petrolatin, declara que su empresa cobró la cantidad de 40 millones, el despacho de Lozano Gracia 45 millones y los hermanos Salas Cacho, 60 mdp
El semanario Proceso ha revelado que durante su gobierno, Felipe Calderón compró a la empresa israelí, Rafael Advanced Defense Systems, equipo bélico y de espionaje para que PEMEX combatiera la ordeña de ductos; tal equipo acusa que costó 110 millones de pesos.
A la par de la compra de este equipo, el entonces panista transfirió más de 140 millones de pesos a cuatro empresas mexicanas, de las cuales tres son de panistas: Antonio Lozano Gracias, ex procurador y a los hermanos José Luis y Jorge Salas Cacho.
Tanto las Secretarías de la Defensa Nacional y de la Marina, además de Presidencia, dieron su visto bueno a la operación confidencial, por lo que PEMEX procedió a pagar a Rafael, y ésta empresa a su vez, depositó a sus operadores mexicanos, los hermanos Salas Cacho, los cuales ya tenían conexiones de alto nivel con la petrolera mexicana, siendo la empresa Petrolatin el enlace y Lozano García el encargado del aspecto jurídico.
En el periodo de Peña Nieto, tales adquisiciones no fueron usadas por el priista, pero los negocios continuaron, y en diciembre del 2015, la Policía Federal compró una plataforma de espionaje por un valor de 2 mil millones 459 pesos.
Alfonso Durazo, actual Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, denunció que el contrato durante el peñanietismo fue irregular y a sobrecosto, dejando una deuda a la administración actual por mil 300 millones, lo cual ya fue reportado ante la Fiscalía General de la República y la Secretaría de la Función Pública.
El primer contrato de Rafael en México, firmado el 18 de noviembre de 2009 por Pemex Exploración y Producción (PEP) y los ejecutivos israelíes, incluía la instalación de sensores en ductos, así como la compra de una decena de aviones y lanchas no tripulados, que serían controlados desde dos Centros de Comando (C4) en Monterrey y Villahermosa.
Pese a que el contrato original no contempla pago a los intermediarios de la empresa israelí, Héctor de la Garza Poinsot, dueño de Petrolatin, declara que su empresa cobró la cantidad de 40 millones, el despacho de Lozano Gracia 45 millones y los hermanos Salas Cacho, 60 mdp.
Los depósitos debían permanecer en secreto. Sin embargo, en abril de 2013 el equipo antilavado de la oficina del Deutsche Bank en Estados Unidos envió un reporte de actividad sospechosa a la Unidad de Inteligencia Financiera del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (Fincen), sobre una serie de 312 transferencias extrañas realizadas por Rafael Advanced Defense Systems Ltd entre enero y marzo de 2013, por un total de 135 millones de dólares.
Tras una entrevista, Lozano García y De la Garza aseguran que el equipo era necesario y eficiente para combatir el robo de combustibles, agregando que Peña no usó la infraestructura adquirida, todo debido a su nuevo director de seguridad de PEMEX, Eduardo León Trauwits, el cual venía de ser jefe de escoltas del priista.
Lozano García y De la Garza aclararon que ambos se distanciaron de los hermanos Salas Cacho por pleitos legales privados y diferencias en la manera de operar.
José Luis Salas Cacho es un empresario polémico y ha sido un personaje influyente en el PAN en las últimas cuatro décadas. Fungió como operador financiero en diversas campañas electorales, notablemente la de Vicente Fox, durante cuyo sexenio fue asesor externo de Pemex y a la vez integrante del consejo de administración de Transportación Marítima Mexicana, una empresa que recibió 219 millones de dólares de la petrolera.
Con la llegada de Peña a Los Pinos, los hermanos continuaron haciendo negocios de espionaje con Rafael Advanced Defense Systems, sin embargo Proceso detalla que no ha localizado a los hermanos, ni con sus abogados ni vía celular.
Rafael Advanced Defense Systems es una empresa hermética cuyos negocios son secretos, además de que solo vende a autoridades públicas, pero no aparecen registros de sus negocios, pues el semanario detalla que no ha tenido éxito al momento de pedir información sobre los contratos de la empresa israelí.
Con información de: Proceso